domingo, 4 de diciembre de 2011

Terrorismo Psicológico.

Por Samir Ammar.


Históricamente, el estudio de las formas de violencia terrorista se ha centrado en la violencia de tipo físico, como atentados con bomba, asesinatos o secuestros. En la actualidad, sin embargo, entre investigadores y profesionales de la salud existe una mayor conciencia sobre la necesidad de incluir e investigar también las formas de violencia que no causan necesariamente heridos o muertes, pero que suelen ser percibidas como experiencias traumáticas (Krug, Dahlberg, Mercy, Zwi y Lozano, 2003).


Cuando estaba escribiendo este articulo sucedió algo que me llamo mucho la atención pues coincidencialmente en Villavicencio se dio un atentado de estas características cuando toda la ciudad entro en un pánico colectivo sintiéndose amenazados por una supuesta avalancha causada por la represa de Chingaza  y aunque la noticia y los efectos fueron mediáticos,  sirve para ilustrar un poco lo que a mi parecer es un atentado contra los Marmateños que paulatinamente es victima de amenaza de terrorismo Psicológico.


Que Marmato esta en zona de alto riesgo.
Que El presidente Uribe ya  vendió a Marmato.
Que El presidente Santos tiene acciones en la Multinacional

Que los mineros Marmateños son ilegales.
Que no les vamos a vender Dinamita.
Que si no venden las minas los expropiamos.
Que si no venden las Casas los expropiamos.
Que si no cambian las casas por casitas que más parecen  alcancías en el Llano los sacamos sin nada.
Que el que no venda sale sin nada.
Que usted no tiene nada que vender.
Que si no tiene titulo minero no puede vender el oro.
Que contra las multinacionales nadie puede.
Que contra el gobierno nadie puede.
Que los mineros son testaferros del narcotráfico.
Que los mineros son testaferros de los paramilitares.
Que los mineros son testaferros de la guerrilla.
Que los mineros son testaferros de las Bacrim.
Que la guerrilla, los paramilitares y las bacrim son los dueños de los títulos mineros.
Que el Gobernador esta a favor de las multinacionales.
Que ya somos dueños de Marmato.
Que el Alcalde esta a favor de la explotación a cielo abierto.
Que los ex-ministros ahora son ejecutivos de las multinacionales.
Que la locomotora minera es desarrollo para el país.
Que la minería a cielo abierto si es responsable, mientras la pequeña mineria no lo es.
Que la minería a cielo abierto es desarrollo.
Que los mineros Marmateños son ilegales.
Que vamos a combatir la minería ilegal.

Somos victimas no de uno, sino de cientos de amenazas psicologicas, que hacen de los Marmateños un mar de nervios, cada día en cada hogar de cada Marmateño el tema es hasta cuando aguantaremos tanta presión, indudablemente es una herramienta de desestabilización social que tiene profundas implicaciones emocionales.

Y es que no solo la sosobra con que mantuvieron a la población del pesebre de oro de Colombia con el peligro eminente en que se encontraban los pobladores de la cabecera Municipal y aunque los estudios demostraban lo contrario y el paso del tiempo reafirmaba las investigaciones, el Gobierno cómplice de las multinacionales no pierden oportunidad para recalcar que Marmato debe reubicarse por que esta en zona de riesgo, sin embargo esta tesis se ha ido desvaneciendo pues al demostrar de que tal amenaza era mitigable no les quedo más remedio que buscar otro caballito de batalla, pero la pregunta es, ¿el daño psicológico que ha causado y causa las diferentes amenazas de este tipo a los Marmateños son un atentado a la dignidad de las personas?.

Mas grave aún que las amenazas, son que estas provengan del mismo gobierno, porque son ellos con sus discursos y acciones los que demuestran que ´el poder es para poder´ y que en el País se hace lo que ellos mandan, y si para ello es necesario ´ajustar la ley´pues lo hacen como en el caso del código de minas que esta hecho, diseñado y pensado para destruir al pequeño minero en pro de los grandes capitales transnacionales.

El interrogante que me queda sobre este tema es ¿somos victimas del terrorismo psicologico?, a mi modo de ver las cosas, si.

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